La narrativa sirve para dar una explicación histórica, es decir, es darle sentido y hacer inteligible el mundo que nos rodea con una explicación del acontecimiento; para esto es fundamental pensar históricamente, pues los hechos históricos implican temporalidad, como una evidencia donde el tiempo narrado se construya de un presente hacia lo real-pasado, y para ello su enseñanza requiere de un conjunto de estrategias educativas que hagan al alumno reflexionar y problematizar la situación para desarrollar el pensamiento crítico y reflexivo en ellos.
El interés por la narrativa actualmente en las escuelas es orientar la enseñanza y el aprendizaje de la historia hacia la naturaleza contextual específica y compleja de este conocimiento y hacer que el estudiante obtenga un pensamiento lógico-científico en sus formas de proceder, es decir q pueda crear hipótesis apuntando a generar “realidades posibles” y así dotar de significado a la experiencia del hombre. De este modo la verdad histórica descansa en las huellas dejadas por el pasado y en las experiencias de otros por lo que es fundamental poseer una empatía histórica es decir haciendo una recuperación histórica e interpretándola desde una perspectiva temporal